En el Centro Residencial Tartessos, la Cruz de Mayo se ha convertido en mucho más que una simple festividad; es una vibrante celebración de inclusión, tradición y alegría colectiva. Este año, hemos adaptado una serie de actividades para garantizar la participación de todos nuestros residentes, manteniendo vivas las costumbres que nos definen y unen.
La decoración de la cruz ha sido el centro de atención, donde flores, papeles de colores y materiales reciclados se han utilizado no solo para embellecer el símbolo tradicional, sino también para estimular cognitiva y sensorialmente a nuestros participantes. El resultado fue un símbolo festivo que representó el esfuerzo y la creatividad de todos los involucrados.
No menos importante fue la música y el baile, elementos que llenaron de energía y ritmo la jornada. Estas actividades se han mostrado especialmente efectivas para fortalecer la memoria, mejorar la movilidad física y promover la salud emocional.
Los juegos tradicionales y la degustación de productos típicos de nuestra tierra no solo saciaron el paladar, sino que también avivaron el espíritu de comunidad. Los sabores de temporada ofrecieron un viaje sensorial que, sin duda, enriqueció la experiencia general.
Este evento no solo animó espiritualmente a quienes participaron, sino que también reafirmó la importancia de la preservación de nuestras tradiciones y la promoción de la alegría en nuestra convivencia diaria. Estamos orgullosos de haber creado una jornada inolvidable que, sin duda, motivará futuras celebraciones.
¡En el Centro Residencial Tartessos, cada día es una oportunidad para celebrar juntos la vida y nuestras ricas tradiciones culturales!